
Fue muy difícil intentar luchar contra algo que yo no quería ser. Pero con el paso del tiempo tuve que verme obligada a aceptar mi destino.
El destino de lo que sucedió hace quién sabe cuánto tiempo atrás, tiene un nombre, y su nombre es: Ade; Ade fue quién me convirtió en lo que ahora soy, Ade fue quién me enseño a ser y a admitir lo que mi destino me deparó y Ade me obligó a ser suya, a amarle y ser su prisionera en su mundo, en el mío, en el mundo de los vampiros.
http://adeangelcaido.blogspot.com/
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